Es primavera en México. María Guadalupe se levanta la pollera con una mano y con la otra, sostiene una sandía herida de muerte. Se sienta en la vereda -como casi todas las tardes de sol -y come y mira.
¡ Y cómo mira !
No andan muchos charros a esa hora, pero pasan una que otra bicicleta.
La bicicleta de la infancia la lleva a Guadalupe con trenzas florecidas; mejicanita Lupe con ojos llenos de aridez ; de sol; de frutas y de historias cruzadas por revolucionarios con botines.
La bicicleta que conduce a María Guadalupe adolescente, es con canasto arriba. Y en el canasto va un hijo de piel oscura y seca.
Pasan la bicicleta del trabajo vendiendo cucuruchos de melón y ají; pasa un hombre rodado ; pasaron una tía cuyo marido Don José, es mariachi... y poco más.
Lentamente se escurre la sandía y puede verse la primavera en México. Puede verse, lentamente, la vida de María Guadalupe pasando en bicicleta.
Fin
* En Menta. Ediciones Orillera 2009. Foto de web
1 comentario:
¡Hola! Encontre tu libro Menta en mi casa, por alguna razon desconocida (auqnue sospecho que lo trajo mi hermana de 11), y le pegue una hojeada, esperaando encontrame con un libro de esos de biblioteca de escuela catolica que no tienen mucho para decir. Para mi sorpresa me encontre con que no es sino un Gran Descubrimiento de esos que nos sacan de la cotidianeidad. Se ve que aun debo estar verde como la menta (aunque tengo 19 cuasi 20 años) porque me provoco como una especie de sacudida, por lo sorprendida y por tu lenguaje, y nose. A mi tambien me gusta escribir y espero provocar alguna sacudida en alguien alguna vez. Mientras tanto, no podia dejar de saludarte (gracias por dejar blog a mano), y quizas algun dia cruzarte sin saber por esta pequeña ciudad. Saludos.- JUlieta.
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